Las historias de Ángela Santos, estudiante de Psicología en Buenos Aires
Episodio 7/2021
Ángela estaba muy feliz, porque por fin estaba en el Teatro Colón, una de las salas de ópera más importantes del mundo. El Teatro Colón estuvo cerrado quince meses por la pandemia de Covid 19 y el 2 de julio reabría sus puertas con una función de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, que iba a interpretar una obra de Gustav Mahler, “La canción de la tierra” (Das Lied von der Erde).
—¡Cuánta gente que hay acá, Ángela, le dijo Inés a su hija.
—Sí, mamá. Ya sé. Pero no te preocupes. La gente es cuidadosa. ¿Ves? El personal del teatro cuida que todos tengan sus mascarillas puestas. Mirá. Acá podemos rociarnos las manos con el famoso desinfectante.
Ángela y su madre, Inés, estaban en la cola para entrar al Teatro Colón. Era un regalo que Inés le había hecho a su hija, porque sabía que le encantaba ir al teatro y desde comienzos de la pandemia, por supuesto que no había podido ir.
El Teatro Colón era impresionante. Uno de los edificios históricos más representativos del país. Internacionalmente reconocido por su acústica y por su enorme valor patrimonial. Fue inaugurado el 25 de mayo de 1908.
—Hija, estoy tan feliz de poder estar acá contigo. Este lugar es maravilloso, ¿no te parece?, preguntó Inés, mientras se colgaba del brazo de Ángela y las dos avanzaban lentamente en la cola.
Las personas estaban de pie, a unos dos metros de distancia una de la otra. Ángela y su madre estaban juntas, porque pertenecían a una misma familia, una misma “burbuja”.
—Sí, mamá, estoy totalmente de acuerdo con vos. ¿Te acordás cuando vine por primera vez al Teatro Colón? Nunca me voy a olvidar. Habré tenido unos diez años y me trajiste a ver un ballet divino: El lago de los Cisnes, de Tchaikovsky. ¡Qué maravilla, mamá!
Ángela y su madre se sentaron en sus asientos reservados con mucha antelación, listas para disfrutar de la velada. Un concierto de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires en uno de los teatros más hermosos del mundo.
Hay más butacas vacías que ocupadas. Las personas estaban sentadas con gran distancia unas de otras. Era triste, pero al menos era posible participar y escuchar un concierto muy bonito.
Las luces del teatro se apagaron, toda la gente dejó de hablar y la música comenzó a sonar. Una maravilla.
Cómo hablar mejor español: No todo lo que brilla es oro
Hola a todos nuevamente y bienvenidos al blog Ganas de hablar.
Yo soy Cristina y en este blog les presento diferentes vídeos para ayudarlos a mejorar sus conocimientos de español con vídeos gratis y muy fáciles de comprender.
Les recomiendo que los escuchen varias veces y no solo mis videos o podcast, sino todo lo que puedan encontrar en español en Internet. Ideal es que se informen sobre temas que a cada uno de ustedes les interesan, porque es la mejor manera de aprender y de retener lo aprendido. Si a mí no me interesa la física, no es ideal aprender un idioma con temas de física. Porque me va a costar muchísimo recordar las palabras.
Este refrán del mundo hispanohablante del que les quiero hablar hoy es: No todo lo que brilla es oro. Acá necesitamos conocer el significado de dos palabras: “brillar” y “oro”.
La palabra “brillar” es un verbo. Significa despedir luz propia, como el sol o las estrellas, o reflejada, como lo hace la luna, por ejemplo. Un sinónimo es “relucir”.
La palabra “oro” es un sustantivo. El oro es un elemento químico, un metal noble de color amarillo brillante, muy blando, con el que se pueden hacer joyas muy hermosas.
El refrán: “No todo lo que brilla es oro” se relaciona con lo siguiente: a veces pensamos que una pieza es de oro, porque brilla mucho, pero no lo es. Figurativamente esto quiere decir que no tenemos que dejarnos deslumbrar por las apariencias, por nuestra primera impresión superficial de una persona o de una cosa.
Es decir, el refrán nos indica que vayamos a la profundidad y no nos quedemos en la superficie, porque a veces, las apariencias engañan. Tenemos que profundizar y no dejarnos engañar por las apariencias.
Muchas veces relacionamos este dicho con nuestra opinión sobre una persona. En general, cuando uno piensa que alguien tiene muchos conocimientos sobre un tema, pero más tarde vemos que esa persona no nos ha dicho lo correcto, podemos usar este refrán: “No todo lo que brilla es oro.”
Otro ejemplo: Marta y Juanita están paseando por la ciudad y ven una vidriera con bolsas muy bonitas.
Juanita le dice a Marta: “Marta, mira qué belleza esa bolsa. Me la quiero comprar.”
Y Marta le dice: “Hm… no sé. Yo hace un tiempo compré una bolsa en esta tienda y se me rompió a las pocas semanas. Estas bolsas son muy bonitas, pero no todo lo que brilla es oro. Es preferible comprar productos de cuero de buena calidad.”
Bueno. Espero que este video les sirva para comprender otro refrán muy usado en el mundo hispanohablante. Una pequeña aclaración: a veces pueden escuchar el refrán de la siguiente manera: “No todo lo que reluce es oro” o también: “No es oro todo lo que reluce.” Son idénticos.
Les mando un fuerte abrazo y les deseo a todos una excelente semana hasta pronto hasta la próxima. Chau
Cómo hablar mejor español: Canapé intercultural – Cómo nos despedimos en una fiesta
Hola a todos nuevamente y bienvenidos al blog Ganas de hablar.
Yo soy cristina y en estos vídeos les intento presentar material que les pueda ayudar a mejorar sus conocimientos de español.
Este blog se llama Ganas de hablar y está relacionado con ganas de hablar en español por supuesto.
El vídeo de hoy:
es otro pequeño canapé intercultural y les quiero contar sobre una diferencia muy grande o les quiero hablar sobre una diferencia muy grande en la manera de despedirnos cuando estamos en una fiesta.
Por ejemplo una gran diferencia entre Alemania y Argentina, que son las dos culturas en las que yo vivo o viví muchos años.
En Alemania vivo actualmente y viví en Argentina y en Brasil 24 años. Entonces les quiero empezar a contar esto.
Estamos supónganse la siguiente situación: estamos en una fiesta en Alemania, con amigos, ¿sí? Llega el momento de irse de la fiesta.
Son por ejemplo las 12 de la noche y yo digo: “Bueno, me tengo que ir.” Entonces empiezo a saludar a los amigos y a despedirme y este proceso, hasta que yo salga realmente de la casa de mis amigos, puede llegar a durar una hora, porque yo digo bueno me voy a despedir, me quiero ir a mi casa y empiezo a hablar con él.
“Hola, bueno, cómo estás y sí, yo me estoy yendo. Me voy.” Entonces ahí empiezo a hablar con esa persona a pesar de que en realidad me quiero ir, pero charlo un buen rato con la persona.
Luego me voy al próximo y le digo: “Bueno, me voy.” “Ah qué bien, cómo estás, todo bien vamos a hablar pronto”, y empiezo otra conversación mientras voy llegando a la puerta y voy tratando de ver dónde está el anfitrión.
El anfitrión o la anfitriona:
Son las personas que me han invitado, ¿sí? Así que es un proceso de despedida que dura bastante tiempo. Es una cosa de más o menos… eso es muy personal, ¿sí?
No podemos generalizar nunca eso. Es algo muy importante pero en Argentina esto es muy normal. Hasta que salimos realmente de la casa puede llegar a demorar una hora.
Yo durante una época estaba con una persona, con un hombre alemán que me acompañaba. Estábamos en esta fiesta juntos y él como alemán decía:
“Vamos a casa.” Vamos a casa es una cosa de un minuto para él, que decía: “Bueno, listo vámonos.”
Entonces estaba siempre muy sorprendido con mi proceso de una hora hasta que por fin salíamos de esa casa y en esta relación que yo tenía de un hombre alemán y yo, argentina viviendo en Alemania, siempre era muy sorprendente ver y descubrir las diferencias que teníamos.
Bueno y por eso como esto es una cosa que realmente yo sé que es una gran diferencia se los cuento en este canapé intercultural.
Es decir:
para mí es muy normal demorar una hora o media hora, depende, en el proceso de despedida en una fiesta y para una persona -generalmente es así- aquí en este país, en Alemania, es un proceso mucho más rápido: un segundo: “Ahora nos vamos y adiós, nos vamos.”
Pero bueno me pareció que es interesante quizás contarles esto para que sepan que realmente hay grandes diferencias, pero que igual no se puede generalizar nunca, ¿sí?
Eso nos llevaría a formar estereotipos, y no quiero eso, ¿sí?
Pero gran parte de la gente que viene de una cultura sudamericana me parece que va a entender perfectamente lo que estoy diciendo y gran parte de la gente que vive en culturas como la alemana también me va a comprender, ¿sí?
Bueno ustedes pueden comentar abajo cómo lo ven. En este vídeo, debajo del vídeo, pueden comentar sus experiencias. Pueden comentar cómo es esto en sus países, en sus culturas y entonces, bueno, vemos cómo es para cada uno.
Les mando un fuerte abrazo y que sea hasta la próxima. Adiós
Cómo hablar mejor español: Presente de subjuntivo – capítulo 6
Hola a todos nuevamente y bienvenidos al blog Ganas de hablar.
Hoy les traigo otro episodio del subjuntivo. Presente de subjuntivo. Porque este año 2021 les quiero explicar cómo usamos en subjuntivo y hasta ahora ya hemos hecho cinco diferentes casos.
Mejora tus conocimientos de español: El castellano de Argentina
Hola a todos nuevamente y bienvenidos al blog Ganas de hablar. Hoy les voy a hablar un poco sobre sobre mi país natal, la Argentina. Nosotros en Argentina tomamos mucho mate. Este es, por ejemplo, un típico mate argentino que tiene la bombilla y el mate. Continuar leyendo «Mejora tus conocimientos de español: El castellano de Argentina»